Miopía

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¿Qué es la miopía?

La miopía es un defecto de refracción, en el cual las personas afectadas pueden ver con claridad los objetos situados en distancias próximas (menos de 50 cm), pero sin embargo no pueden enfocar bien los objetos lejanos.

Hay varias razones por las que puede desarrollarse la miopía. Una de ellas es que el ojo miope es más alargado de lo normal, lo que hace que las imágenes se enfoquen por delante de la retina. Pero también puede deberse a la curvatura de la córnea que puede ser más curva de lo normal o por tener un cristalino demasiado potente, lo que afecta la forma en que la luz se enfoca.

La miopía es una condición muy común, especialmente en niños y jóvenes. De hecho, según varios estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que para el año 2050, la mitad de la población mundial podría tener miopía.

Síntomas de la miopía

La persona miope explica que tiene una excelente visión de los objetos próximos, pero una visión borrosa de objetos lejanos. En ocasiones, también comenta que para poder enfocar de lejos precisa ajustar o colocar los ojos para ver mejor.

Causas y factores de la miopía

Existen diversas causas y factores asociados a esta alteración, entre ellos figuran los siguientes:

  • Predisposición genética: el papel de la genética en el desarrollo de esta alteración refractiva es innegable. Si tus padres la tienen, es más probable que tú también la desarrolles.
  • Enfermedades: ciertas enfermedades oculares pueden causar miopía temporal o permanente.
  • Factores ambientales: en algunos casos, esta alteración puede estar relacionada con actividades que requieren un enfoque cercano, como leer, usar dispositivos electrónicos o trabajar con herramientas de precisión. Pasar mucho tiempo en interiores y la baja iluminación también pueden ser otros factores contribuyentes.

¿Qué tipos de miopía existen?

Se pueden diferenciar dos tipos:

  • Miopía simple: suele aparecer durante la adolescencia y aumenta hasta que el crecimiento de la persona se detiene. Generalmente, no sobrepasa las 6-7 dioptrías de graduación y la exploración oftalmológica es normal.
  • Miopía magna o alta: también conocida como miopía patológica o miopía degenerativa. Suele presentarse desde el nacimiento o la infancia y puede continuar aumentando incluso después de que el crecimiento de la persona se haya detenido hace años.
Es importante destacar que la magna o alta puede estar asociada a complicaciones oculares más graves, como desprendimiento de retinaglaucoma y degeneración macular asociada a la edad (DMAE). Por lo tanto, es crucial que estas personas se sometan a exámenes oculares regulares para detectar y tratar cualquier problema de manera temprana.

¿Se puede prevenir?

La miopía es una condición multifactorial, lo que significa que varios factores contribuyen a su desarrollo. Si bien no existe una forma garantizada de prevenirla, especialmente cuando existe predisposición genética, sí que hay formas de disminuir el riesgo o retrasar sensiblemente su progresión, así como corregirla.

Habitualmente, se corrige con el uso de gafas o lentes de contactoPero es muy importante realizar revisiones con carácter preventivo en 2 tipos de pacientes:

  • En niños con edades por debajo de los 6 años puesto que, en una gran cantidad de casos, no son conscientes que ven mal y existe el riesgo de desarrollar un ojo vago.
  • En personas que ya han sido diagnosticadas de miopía magna, es fundamental realizar controles de forma anual para descartar complicaciones asociadas a la miopía, ya que en algunos casos no manifiestan sintomatología.
La prevención y el control son esenciales para mantener una buena salud ocular. Pasar tiempo al aire libre, reducir el tiempo dedicado a actividades de cerca y tomar descansos regulares durante estas actividades son medidas que pueden ayudar a prevenir o retrasar la progresión.

Tratamiento de la miopía

Habitualmente se corrige con gafas o lentillas. En cuanto a la corrección quirúrgica de la miopía, existen dos técnicas:

  • Las miopías simples se tratan con cirugía láser encima de la córnea.
  • En las miopías magnas, la opción más habitual es el implante de lentes intraoculares fáquicas (entre el cristalino y el iris) o pseudofáquicas (extrayendo el cristalino).

Conviene señalar que será necesario un exhaustivo estudio oftalmológico para decidir si el paciente es un buen candidato a la cirugía y para determinar cuál es la técnica más apropiada.